El barman de Taberna La Solia habló este jueves en el programa ‘Las mañanas’.
En España parece que todas las decisiones que se toman generan polémica. Sobre todo si se trata de dinero, aunque la cifra sea de 1,50 euros. Es el caso que le está ocurriendo a Óscar Solana, barman cántabro, formador en el sector de la coctelería y gerente de Taberna La Solía.
El pasado martes fue entrevistado en Cuatro dentro del espacio ‘En boca de todos‘. Este programa se hizo eco de una medida que ha tomado Óscar Solana hace un mes, y no es otra que la de cobrar a los clientes que no consuman nada la cifra simbólica de 1,50 euros.
Como era de esperar las redes sociales han empezado a echar humo, ya que muchos no estaban de acuerdo con esta medida, mientras que otros pensaban que era acertada.
Contar con una empresa o ser emprendedor en estos tiempos es deporte de riesgo, ya que los costes han aumentado a causa del covid y de la guerra de Ucrania. Solo hay que ver lo que ha subido la luz, los productos primarios, etc. Una situación que le afecta a toda la sociedad al completo, por lo que se debe intentar reducir gastos para poder sobrevivir o llevar una vida “más cómoda”. En el caso del sector de la hostelería se han visto obligados a subir precios, como en otros negocios, para poder “ganar algo de dinero” ya que si mantienen los que tenían en 2019, por poner un ejemplo, trabajarían para no ganar prácticamente nada.
Óscar Solana es uno de los afectados, ya que el aumento de la luz del local y otros gastos obligatorios le han hecho modificar la manera en la que trabaja y aún así está ganando menos de la mitad de lo que generaba hace tres años.
Taberna La Solía, desde la pandemia, sigue manteniendo una serie de medidas para que los clientes se sientan cómodos y sobre todo seguros en su local. Mantiene el espacio entre mesas (esto resta aforo), ha adaptado la terraza, ubican a los clientes en el establecimiento cuando llegan, han retirado la barra, entre otras medidas.
No es plato de buen gusto que te llamen para reservar una mesa de ocho, por ejemplo, y no puedas acoger a esos futuros clientes, ya que te quedan solo seis asientos libres, por poner un ejemplo, mientras que un 25% de la clientela está “acompañando” a otros y ocupando un hueco sin consumir. A todo esto hay que sumarle el que llama para reservar una mesa de seis, o de cuatro, y que a la hora concertada no se presenta, dejando ese hueco de ocupar y rechazando otras llamadas por tener reservado ese sitio.
Por estas y otras muchas razones, Óscar Solana ha tomado la decisión de cobrar 1,50 euros al cliente que no consuma nada. Aquí lo explica
Foto de https://www.spend-in.com/people/oscar-solana
